Todos sabemos, por experiencia propia o la de algún familiar o amig@, que organizar una boda no es algo fácil. Para empezar, hay que fijar la fecha de la celebración, dónde se va a oficiar (iglesia o juzgado), los invitados, las invitaciones, la hacienda o el restaurante, el traje del novio, el de la novia, las flores… en fin, un montón de cuestiones que debes decidir y que no es bueno dejar para el final porque puede ser que entonces no encuentres lo que realmente quieres. De hecho, suele ser el caso del coche que os va a llevar.